Llegada a Castro

Inmediatamente llegamos a Castro decidimos con Tatán realizar una función para recaudar dinero. Nos fuimos a la Plaza de Armas, recién instalada en el centro de todo. Montamos la mesa y comenzamos a hacer la función (primera función de a 2 de Bromeo). No nos fue muy mal, sacamos una buena gorra. Todo parecía marchar muy bien, hasta que llegó el Señor Administrador. Ete aquí que el muy buen hombre primero nos echó con un "gestito de idea" (buena onda) haciéndose el más "hablo el idioma de la calle". Luego, de mala onda nos pidió que nos retiráramos. Ahí comenzó la discusión y sacamos textual de él las siguientes frases célebres:
-"La Plaza no es pública" (Si el permiso lo da el Alcalde concluímos que era de él)
Hasta se armó el quilombo cuando a Tatán lo menospreció diciendo que porque tatán era artista y se rebelaba al poder "andaba vestido así" (pantalón roto; ojotas y patas negras de sucias). Nos afectó la moral. Lo despedimos al grito de VIVA PINOCHET!!! La dictadura no se fué.
Que pasó. Llegaron 3 carabineros (pacos) a falta de uno. Y se armó la grande porque empezamos a discutir y a mi que me entusiasma la discusión política comenzamos a confrontar en "vivo" los dichos del Sr. Administrador de la Plaza Pública con los carabineros. Ellos no reconocen el trabajo del artista callejero, y consideran como todo organismo público que los artistas tienen que pedir permiso y en todo caso ir a rentas para poder pasar la gorra. Inexplicable. De hecho tuvimos que pedir permiso o irnos de Castro. Lo hicimos, no sirvió de nada. Las funciones fueron malas de recaudación.
¿Cómo puede ser posible que los artistas callejeros tengan tantas dificultades en este país (Chile) para trabajar? No pedimos robar ni maltratar a la gente. Encima que llevamos arte de pueblo en pueblo, que nos comunicamos a través del goce y el disfrute de un arte legendario, capaz de transmitir valores elevados, como premio recibimos el maltrato, el despojo, y la falta de conciencia del arte que estamos ofreciendo a la gente. Mejor sería que nos vayamos a casa a ver la novela, no?